¿Esas moneditas que te dan del cambio de alguna compra y que sueles acumular en alguna esquina de tu hogar? Si en lugar de ir dejándolas por ahí cogiendo polvo (y perdiéndose en muchos casos) se las dieras de comer a este gato, tu balance financiero podría cambiar.
No sabemos si el gato se las comerá o simplemente es que tiene más espíritu de banquero que el Tío Gilito, lo que si podemos asegurar es que el gato hace muy bien sus funciones de hucha y al mismo tiempo es adorable. Tu cara sonreirá cada vez que pongas una monedita en el exterior de la caja y veas a este “ladrón” abrirla para sacar su patita y quedarse con el dinero, pero tu mente también sonreirá al pensar que estás haciendo algo bueno para el futuro de tus ahorros.
-Dimensiones: 12,6 x 10,7 x 10,2 cm
-Peso: 386 gramos
-Interesante: Necesita baterías