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Si eres un culo inquieto, un cohete borracho, si vas siempre por la vida como un tiro y sientes la necesidad imperiosa de parar de vez en cuando, pero no sabes como hacerlo, aquí va una idea, puede que absurda y descabellada pero algo es algo. Además es muy sencillo, solo tendrás que sentarte a contemplar este mini oasis magnético Zen, y ya está. Si consigues estar un buen rato parado, quieto, en silencio, relajado, mirando como una pequeña bolita va recorriendo todas las líneas de arena trazadas en este oasis en miniatura, ya tendrás la mitad del camino conseguido. Te atrapará, capturará tu atención y quizas logrará calmarte y apaciguarte ¡Todo un reto!
-Material: Metal, imanes, arena y componentes electrónicos.
–Peso: 6,5 kg.
Redactora web curiosa, amante de las palabras y de los productos singulares. Me encanta investigar por la red y compartir mis descubrimientos en dejadepensar.com. Me gusta el mar y disfrutar de la vida.